Pro Libertate Patria Gens Libera State
Ésta es la inscripción que preside la entrada al Gobierno de Navarra, a escasos metros del Monumento a los Fueros de Iruña, capital del Viejo Reyno. No apta para reacios a la lengua latina, que entre nosostros hubo bastantes en nuestros años mozos de instituto. Dado mi pobre conocimiento de la Lengua Latina, no me arriesgaré a traducir el lema. Si alguien tiene la amabilidad de hacerlo, vaya mi agradecimiento, ya que explica (¡y de qué modo!) el ansia libertaria que los navarros hemos sentido siempre.
No era allí donde quería recalar ayer, aunque un error de logística me llevó a contemplar el letrero durante varios minutos. En realidad había quedado en la Cámara Foral con Carlos García Adanero, portavoz de UPN en el Parlamento de Navarra. Un hombre cordial donde los haya, por cierto. Tuvo la amabilidad de abrirme de par en par las puertas del Salón de Plenos, cuya foto adjunto al lado de estas líneas.
La entrevista fue interesante. Si soy capaz de aclararme con el HTML, intentaré colocar por aquí un enlace, para quienes la quieran disfrutar. Eso sí, me parecieron interesantes dos afirmaciones.
En una de ellas, García Adanero habla de la importancia de la lealtad y el respeto mutuo en las relaciones entre la CAV y la Comunidad Foral Navarra. "Porque tenemos muchas cosas en común", dice, bajo mi punto de vista, con gran acierto. Pero, ¿por qué entonces estamos separados desde el punto de vista administrativo? Líneas más abajo rechaza el órgano de cooperación vasco-navarro argumentando que responde a "un interés político". Por mi parte, me pregunto: ¿Y qué interés habría en fomentar ese órgano sino un interés político? ¿Qué tiene de peligroso para UPN pretender ese interés conducente a la reunificación de los territorios navarros dentro de España? ¿Qué tiene de indigno plantear políticas para que la Navarra raquítica que heredamos de la Transición se convierta en la Navarra con la que todos soñamos? Las preguntas son ingenuas, ya lo sé. Pero, si sirven para remover las conciencias de algunos, ahí quedan.
Si Sancho VI el Sabio, fundador de mi querida Vitoria-Gasteiz, levantara la cabeza y viajara en el tiempo hasta nuestros días, pensaría: "Faltas de ambición son estas mesnadas de Unión del Pueblo Navarro". Ironías de la vida, la ciudad que fundó en el antiguo emplazamiento de Gasteiz, es ahora la "capital artificial de un país singular" (Potato dixit) y lo que es aún peor: para muchos, capital legítima del universo vasco. ¡Cosas veredes, amigo Sancho! (Alonso Quijano dixit).
No era allí donde quería recalar ayer, aunque un error de logística me llevó a contemplar el letrero durante varios minutos. En realidad había quedado en la Cámara Foral con Carlos García Adanero, portavoz de UPN en el Parlamento de Navarra. Un hombre cordial donde los haya, por cierto. Tuvo la amabilidad de abrirme de par en par las puertas del Salón de Plenos, cuya foto adjunto al lado de estas líneas.
La entrevista fue interesante. Si soy capaz de aclararme con el HTML, intentaré colocar por aquí un enlace, para quienes la quieran disfrutar. Eso sí, me parecieron interesantes dos afirmaciones.
En una de ellas, García Adanero habla de la importancia de la lealtad y el respeto mutuo en las relaciones entre la CAV y la Comunidad Foral Navarra. "Porque tenemos muchas cosas en común", dice, bajo mi punto de vista, con gran acierto. Pero, ¿por qué entonces estamos separados desde el punto de vista administrativo? Líneas más abajo rechaza el órgano de cooperación vasco-navarro argumentando que responde a "un interés político". Por mi parte, me pregunto: ¿Y qué interés habría en fomentar ese órgano sino un interés político? ¿Qué tiene de peligroso para UPN pretender ese interés conducente a la reunificación de los territorios navarros dentro de España? ¿Qué tiene de indigno plantear políticas para que la Navarra raquítica que heredamos de la Transición se convierta en la Navarra con la que todos soñamos? Las preguntas son ingenuas, ya lo sé. Pero, si sirven para remover las conciencias de algunos, ahí quedan.
Si Sancho VI el Sabio, fundador de mi querida Vitoria-Gasteiz, levantara la cabeza y viajara en el tiempo hasta nuestros días, pensaría: "Faltas de ambición son estas mesnadas de Unión del Pueblo Navarro". Ironías de la vida, la ciudad que fundó en el antiguo emplazamiento de Gasteiz, es ahora la "capital artificial de un país singular" (Potato dixit) y lo que es aún peor: para muchos, capital legítima del universo vasco. ¡Cosas veredes, amigo Sancho! (Alonso Quijano dixit).
2 comentarios
Raúl Arkaia -
Gracias por tu aportación. Tan sólo un apunte. En realidad, lo que García Adanero hacía era colocar al mismo nivel a vascongados, aragoneses y riojanos. Vamos, algo así como colocar al mismo nivel a chinos, mongoles y japoneses sólo porque todos ellos tienen los ojos rasgados.
Un saludo cordial. Insisto, gracias por dejarte caer por este blog. Pro Libertate Patria Gens Libera State.
Zuriñe -
Las contradicciones de García Adanero imagino que las tendrán varios en UPN, porque negar que son más las cosas que nos unen que las que nos separan es un planteamiento ridículo. Pensar que a los navarros les unen más cosas con Aragón y La Rioja que con Euskadi ya no cuela.
Imaz escribía en un reciente artículo que el PSOE carecía de Visión de Estado; yo creo que con lo que han hecho en Navarra demuestran que tanto ellos como el PP sí tienen visión de Estado: un Estado unitario, centralista e indivisible.
Siento no poder ayudarte traduciendo la inscripción.
Un abrazo